Frutas de carozo

Entre las frutas de carozo podemos encontrar damascos, cerezas, ciruelas, duraznos y nectarinas. La mayoría de los cultivos de frutas de carozo requieren de un invierno frío para producir fruta. Los duraznos y las nectarinas son los menos exigentes en este aspecto, ya que crecen en climas subtropicales.

Los portainjertos y la fertilización desempeñan un papel clave en la producción y la calidad de las frutas de carozo. Para lograr un enraizamiento saludable y un rápido desarrollo del cultivo, es necesario un programa adecuado de fertilización anual que brinde una nutrición equilibrada para optimizar el rendimiento y la calidad.

Para un cultivo en producción, el fertilizador de nitrógeno aplicarse al final del invierno o al comienzo de la primavera. El fósforo, cuya movilidad es limitada, debe aplicarse cerca de las raíces del árbol. La mejor estrategia para la fertilización con potasio es combinar una buena fertilización al momento de plantar con un refuerzo anual de potasio.

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